Uno de los elementos más sorprendentes del hotel son las columnas de
sus patios. Para el ojo poco avezado, las columnas de hormigón armado con su
recubrimiento deteriorado, son las originales del hotel. Para el ojo entrenado,
sus dimensiones, patologías, características
y detalles constructivos, indican que son posteriores.
Si observamos su materialidad veremos que hierros oxidados han
alterado su recubrimiento. Sabemos que hacia 1889, cuando fue iniciada la construcción
del hotel, el hormigón armado, como material constructivo, era inexistente.
Inclusive, el uso del hierro, ya sea mediante perfiles normalizados, planchuelas
o ángulos metálicos, se reservó para los casos que no permitiesen otra solución
constructiva como ser galerías y balcones. (Recordemos que sus entrepisos eran
de madera).
Archivo P.Grigera |
Seguramente los proyectistas del edificio diseñaron esos patios con
columnas de fundición. Sobre ellos habrán colocado los perfiles de hierro de
las galerías y fijado la herrería de sus barandas.
La imagen de los patios debió ser mucho más liviana donde el contraste
con la solidez del cuerpo principal debió ser notorio. Aún hoy persisten edificios
que conservan esta tecnología constructiva.
Si bien no existen testimonios fotográficos de los patios originales
del hotel es posible observar detalles
constructivos similares en obras proyectadas por esos mismos años.
Sociedad de huérfanas. SAAF. (AGN).1890 |
En la década del 30’ el hotel sufrirá una importante remodelación. Había
que adecuar un hotel de fines del siglo XIX a realidades más actuales. A las
columnas de los patios se sumaron el tanque de agua de hormigón armado, el
reemplazo de las lucarnas, las ampliaciones sobre el patio sudeste y demás
mejoras. La capacidad portante de esta estructura debió generar dudas en lo
responsables de las obras por lo que se procedió a su recalce y recubrimiento
con hormigón. Es probable que estas operaciones constructivas hayan sido
realizadas por el ingeniero Pedro V.Gasco, hijo de Esteban Gasco, uno de los
propietarios del edificio desde 1917 que, a la muerte de su padre, continuará
con la propiedad hasta fines de los 80’.
A partir de las obras de puesta en valor, iniciadas en el año 2013, se
demolieron los sectores agregados del patio sudeste y la cubierta de las
galerías, entre otras tareas.
Sorprendentemente, y escondida entre paredes subsistía una columna
original de los patios. A este hecho se sumará la aparición de restos de
fundición dentro del hormigón de las columnas demolidas de las galerías, dando
confirmación a lo expresado con anterioridad. La sección de las columnas ratifica
los reparos del profesional y la necesidad de su recalce y consolidación
estructural.
Foto: Arq Enrique Malbrán. |
Sería deseable que los responsables actuales de las obras tomaran nota
de la importancia de estos testimonios del pasado del edificio y sean
considerados en la propuesta de puesta en valor que se plantee para el
edificio.
A partir del desconocimiento y falta de criterio en la intervención del
hotel se han perdido muchos elementos y sistemas constructivos originales que
hacían al patrimonio del edificio.
Esperemos entonces que este relato contribuya con su preservación.
Foto: Arq Enrique Malbrán. |